.....de la vida se da en cualquier dirección que tu veas.
Una de mis tantas sobrinas, me invitó el día de hoy a su cita con el ginecólogo, y claro que fui ya que en esta le harían un ultrasonido de su bebé que ya tiene cuatro meses de gestación y por lo mismo y a petición de la mamá le dirían con exactitud el sexo del bebé.
Pues ahí voy, me bañé de un dos por tres, me fui con el cabello estilando y ya en el taxi me iba peinando. Cuando llegamos mi sobrina estaba muy contenta de verme ahí, así que procedimos a entrar.
El ultrasonido fue detallado, el bebé fue medido y sus órganos fueron checados. El bebé se movía mucho y nos daba diversas vistas, fue algo fantástico, fue algo definitivamente enternecedor, mi corazón estaba latiendo muchísimo, realmente estaba emocionada, tanto que varias veces estuve a punto de soltar las de coco, pero me contuve no sé porque tonta razón (lo hubiera hecho).
El bebé nos mostró lo bello que es, nos mostró que el milagro de la vida se da constantemente, y por supuesto nos mostró la grandeza del Señor.
De repente alzó su manita, la extendió y la volvió a cerrar, eso nos hizo reír a todos y lo tomamos como un saludo, si, un saludo de esperanza.
Una de mis tantas sobrinas, me invitó el día de hoy a su cita con el ginecólogo, y claro que fui ya que en esta le harían un ultrasonido de su bebé que ya tiene cuatro meses de gestación y por lo mismo y a petición de la mamá le dirían con exactitud el sexo del bebé.
Pues ahí voy, me bañé de un dos por tres, me fui con el cabello estilando y ya en el taxi me iba peinando. Cuando llegamos mi sobrina estaba muy contenta de verme ahí, así que procedimos a entrar.
El ultrasonido fue detallado, el bebé fue medido y sus órganos fueron checados. El bebé se movía mucho y nos daba diversas vistas, fue algo fantástico, fue algo definitivamente enternecedor, mi corazón estaba latiendo muchísimo, realmente estaba emocionada, tanto que varias veces estuve a punto de soltar las de coco, pero me contuve no sé porque tonta razón (lo hubiera hecho).
El bebé nos mostró lo bello que es, nos mostró que el milagro de la vida se da constantemente, y por supuesto nos mostró la grandeza del Señor.
De repente alzó su manita, la extendió y la volvió a cerrar, eso nos hizo reír a todos y lo tomamos como un saludo, si, un saludo de esperanza.
1 comentario:
muy conmovedor escrito, saludos...
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