CUENTA LA LEYENDA

Hace unas horas me fue contada esta leyenda,
“LOS WHALEEYES”
Los Whaleeyes fueron formados desde la mismísima creación de la Vía Láctea, su origen se debe a la explosión de miles de estrellas y al choque intergaláctico de planetas, trayendo consigo una enorme carga de material que fue arrojado a los planetas sobrevivientes, cayendo éste en su mayoría en los océanos causando con ello la deformación de esta “basura estelar” y dando origen a los ya famosos pero extraños “Ojos de Ballena”
Se les ha llamado así por la forma que tienen tan parecida al ojo de estos enormes mamíferos y porque al encontrarlos en su hábitat natural que es el agua, su forma también es acuosa, dando la sensación de ser el ojo de una ballena.
Estos extraños objetos son sólo vistos en ciertos eventos astrológicos en donde interviene la luna que da lugar a los cambios en la marea, moviendo de tal forma el lecho marino que estas preciosas joyas son arrojadas a la orilla de la playa por las noches y al contacto de los rayos solares su estado acuoso cambia y se endurece, con los rayos solares el color de estos también cambia, creando una gran gama multicolor en donde se combinan las piedrecillas y ligeros metales que logran introducirse en ellas con el paso de los años, dando lugar a extrañas formas multicolores muy apreciadas por el ser humano.
Las que no logran sobrevivir al embate de este bruco cambio solo se secan dando origen a los botones lunares. Que no son otra cosa más que ojos de ballena secos por los rayos solares.
Los “WHALEEYES” pueden ser tomados por el ser humano y por lo regular se usan como adorno pero estos pequeños objetos tienen una bella peculiaridad, a través de ellos se puede ver el universo en donde ellos estuvieron inmersos, el universo del cual provienen y tienen la capacidad de representar en su misma forma aquel pedazo de cielo que les vio nacer.
Existe un Instituto encargado de recolectarlos y de suministrarlos para que estos no sean objeto de tráfico ni de obtención de poder.
A mi se me fue otorgado un whaleeye de color blanco aperlado, que al interior de su forma se encuentra una gran nervatura de hilos plateados que representan con orgullo el universo del cuál esta gema fue expelida.
Siempre la tendré conmigo y observaré a través de ella el milagro de la creación que nos muestra.