Empacando

A unas cuantas horas de partir, me encuentro empacando mis cosas, no quiero que se olvide nada, los souvenirs para la familia, para los amigos, para los cuates pero sobretodo para ti, si para ti.
Aunque ya no hay nada si te llevo uno.
Todos estos días pasados en los que viajé y me contacté con muchísima gente, fueron muy buenos, respiré otros aires, conocí lugares, personas, y aún más comí deliciosas comidas que jamás imaginé.
Fue algo realmente asombroso!
Cómo sin vender todos mis puercos, mis gallinas, caballos y vaquitas, pude viajar tan lejos.
Llevo en mi mente mil imágenes y recuerdos imborrables.
Pero ya es hora de volver!!
De volver a mi terruño, de oler unas ricas enchiladas, un delicioso pozole, una rica birria y unos tacos al pastor, en sí quiero andar en las calles de mi colonia, ir al centro, respirar el aire de un México que empieza a salir una vez más de una mala jugada gubernamental.
Quiero abrazar a mi gente, quiero decirles que los extrañé, y aún cuando haya estado en otro lugar muy lejano siempre me sentí orgullosamente Mexicana y nunca callé mi origen.
Algunos me vieron mal, y otros me mostraron simpatía y algo de compasión pero la gente de la que me rodeé siempre se portó a la altura de la circunstancia.
Ellos me despedirán, en cuanto llegue mi avión le hablaré a Calderas para agradecerle por su gran preocupación por la gente que estamos fuera de nuestro México, y ellos yo sé que se sentirán tristes por mi partida.
Es hora de volver!!
Quiero ver a mis alumnos!
Llegaré a tiempo para alistarme y empezar un día más de trabajo.
Si!!
De trabajo!
México!
Pronto estaré allá!